March 1, 2025

I'm still standing, after all

A mitad de lavar la ropa a mano miré el espejo y me detuve a pensar realmente en ello, quizás dándole más peso de lo normal. Sobre quién soy, en quién me he convertido, dejando de lado mis exigencias diarias y el pesimismo de "no ser todo lo que puedo ser", "no ser todo lo que pude ser".

Luego de trabajar exhaustivamente pero de forma motivada y continua haciendo aseo en la oficina, sin dormir una siesta y con dolores que persisten en estos momentos, tras frustrarme jugando un rato rdr2 porque "soy una incompetente" me quedé un rato disfrutando unos videos de análisis de los personajes de Bojack Horseman, que creo ya he visto mínimo 3 veces porque me gusta el abordamiento no-psicoanalista ni pseudocientífico-místico que le dan al trasfondo, trayectoria y desenlace. La cosa es que hoy, luego de tantos videos donde se habla de cuestiones existenciales, de orientación, crítica social y temas de ciencias sociales, irónicamente luego de quién sabe cuántas veces me pregunté yo misma sobre ello exactamente lo mismo que hoy, me cayó como yunque el "No hago las cosas porque no tengo un propósito", cuando las personas me preguntan cuál es mi meta en mi vida lo tengo tan claro, definido, pero sigo sin serlo. Las personas me reconocen mis logros: "Vives sola", "Te mantienes sola", "Eres fuerte", "Eres tan dulce", "Tan aplicada". Y me niego a menudo a tomarles como verdad, sin ser modesta sino exigente... ¿Pero realmente es mi meta ser todo esto y más?, ¿quiero estudiar y hacer mil cosas porque es lo que busco o meramente quiero llenar cualquier "carencia" para ser "competente" porque "ser excelente no es el máximo, sino el mínimo"?

Esa fue la primera pregunta que me resonó hoy, quizás porque Todd "era un fracasado, que no completaba su ópera rock". Pensé en que no escribo porque transpiro, pasó horas congelada buscando en internet cómo usar debidamente cada palabra, incluso si es la que más conozca y use, me cuestiono al punto de dudar siempre de mí porque "Mi dislexia puede ser un problema", "No quiero pecar de ignorante conformista si puedo educarme, teniendo internet al alcance de mi mano". La accesibilidad a la educación de forma parcial me hace sentir la presión constante de "no estar aprovechando mis recursos para ser mi mejor versión". Así que al final no escribo nada, aunque en mente repaso cada detalle con notable memoria, de tantas tramas que he ido cultivando por años en casi silencio, compartiendo muy ocasionalmente con personas. En el colegio me conocían por vivir leyendo, y efectivamente así era ya que fue la forma de refugio que encontré a la realidad entre mi familia, mis dificultades para socializar, encajar y simplemente vivir. En algún punto terminé mintiendo para seguir siendo bien vista, en más de una ocasión, supongo era un consuelo o quizás el querer llenar las expectativas de otros, pero era meramente una niña y luego una adolescente. No cuestiono leía más que muchas personas de mi colegio en general, e igualmente en las pruebas rendía de forma mediocre o a veces me negaba a leer; pero no sé qué esperaban, leía para imaginar esas historias y luego olvidarlas con el siguiente tomo, no me interesaba saber si era "Alexandra", "Alejandra" o "Alessandra" el nombre de la personaje, yo sabía las emociones que llevaba, me divertía y olvidaba de todo leyendo, eso era todo lo que quería. Curiosamente por un lado trataba de recibir atención y llenar expectativas pero no de profesores, hasta el día de hoy sus molestias y quejas me resultan indiferentes al igual que en su momento, quizás mi rechazo a las autoridades e imposición van de la mano con mi deseo genuino de libertad, de decidir y controlar algo de mi vida, después de todo mis progenitores se encargaron de convertirme en "una niña problemática" por cuestionarlos, rechazar lo que hacían y oponerme. Al final del día ya en un punto final del colegio algunas personas preguntaban para ver mis dibujos, que si escribía, que qué escribía. No sé a veces si era interés sincero o si querían burlarse, tengo una percepción muy distorsionada de quienes me acompañaron toda mi formación educativa obligatoria. Sé que no les dejé fácil el verme normal, pero no por eso justificaré ser señalada y objeto de burla directa o indirecta. Igualmente, ¿debería importar si creían o no en mí en ese entonces?, creo que ante ello diría lo mismo que me digo hoy en día: no interesa lo que gente que no pueda valorarlo diga.

Así que, siendo una muy entre comillas "escritora" frustrada por su obsesión con el detalle, la perfección y el temor de los errores, no es para menos preguntarme si quiero realmente escribir algo. Respuesta que quizás ahora la tengo aún más definida: Sí quiero, y quiero que sea excelente.

Pasando al siguiente personaje con quien en más de una ocasión viendo la serie sentí cercanía y similitud: Princesa Carolyn, una trabajólica determinada, carismática y esforzada que salió adelante por mérito propio pese a cualquier inconveniente, ligada a un idiota que no tenía caso. Mi primera relación fue nefasta como mínimo, recibiendo malos tratos injustificados que no hay por dónde intentar (ni es necesario) perdonar algo, pero la analogía se resume en "Estaba intentando construir una vida con un sujeto que me llevaba al fondo del pozo por su incapacidad de salir adelante, reconocer sus errores y ser por cinco benditos segundos un poco menos egocéntrico", curiosamente vi la serie parcialmente con él. Luego de dejarlo tuve otros desafíos, pero terminé siendo una trabajólica a fin de cuentas, de las que su vida se resume casi en trabajar y tratar de ir por desafíos mayores, logrando crecer por su esfuerzo y sin ceder, reafirmándose a sí misma y en solitario que "puede con todo", "no fue derrotada antes y no lo sería ahora", es tan gracioso releer esas palabras porque es mi discurso desde hace ya como 3 años. Sin familia, sin amigos, recayendo el peso de mi pasado, presente y futuro sólo en mí, tarde o temprano pasé de llorar a decirme con optimismo que "puedo con todo mientras me tenga a mí misma", y es una característica que varias personas valoran de mí abiertamente, con la que sí estoy de acuerdo. El estar sentada con fuertes dolores pese a la medicación (que ya me toca la siguiente dosis), just realizing how far I come although I was so unstable, lonely, desperate the most part of my life trying to put everyhting in order when everyone kept making a lot of noise and chaos, y saber que aún si no sé inglés al menos sólo debo corregir y repasar en vez de empezar de cero, que aunque no me sepa todas las palabras perfectamente en español mi léxico aparentemente me ha permitido más que sólo recibir halagos de terceros, asimismo logrando explayarme de manera que no redunde y sea estimulante porque es necesario pensar en sinónimos, ver "otros caminos para lograr decir lo mismo de manera clara". La verdad se siente genial, no sufrir dolores, ni todo el trauma que tuve que digerir sola, tampoco el no saber cosas, lo que me encanta es saborear mis avances y poder identificarme con un arquetipo el cual si bien tiene sus fallos como todos, después de todo son representación de un conjunto de personas con ciertos rasgos en común, igualmente me resulta grato pensar que me parezco un poco a esa gatita rosa. Aunque no aspiro a la maternidad ni llevar una compañía de agentes para estrellas, pero ese no es el punto en lo absoluto.

Sé que tengo haters que hasta el día de hoy deben estar buscando una forma de molestarme, ya sea por oponerme a sus ideales o porque meramente los rechacé, puedo a veces suponer lo que dirían de cosas como este escrito, cómo me veo después del trabajo, cada cosa de mí. Pero me río en ese momento, y me genera una sensación de plenitud no necesitar jactarme, ni siquiera saber qué piensan o no, sino que en esas situaciones imaginarias que surgen cuando recuerdo que algún día caerán en mi puerta tal vez para agredirme, al menos tengo la certeza de que me quiero, valoro, comprendo y respeto más que suficiente para que me importe tres pepinos no gustarle a ciertas personas. Alguien que nunca queda mal con nadie es insípido, soso, complaciente; yo no soy nada de eso y recordarlo me alegra un montón.

En ocasiones al hablar de mi vida o cosas que pienso la otra parte pensó que le tenía confianza, o que necesitaba su reafirmación. En una de esas charlas de hecho concluí que lo que me gusta es hablar, leerme, sin importar con quién o si es sólo para mí; suelo monologar, quizás por hábito o porque me resulta placentero hacerlo, siento que es divertido y brinda mayor claridad. De hecho por lo mismo algunas personas me miran raro o cuestionaron eso, así como "mi personalidad para salir con un outfit de dark bride a la calle" y mis estrellitas para el acné, entre muchas otras cosas que me han dicho "debía cambiar" pero se me hacía un sinsentido tan surreal y cómico, no niego a veces fastidia que gente tan ignorante, reducida, sólo sea capaz de criticar lo ajeno y desconocido, a mí me deslumbra ver por la calle un outfit llamativo, único, que resalta y desborda personalidad así como arte. El aesthetic es bonito pero eso es todo muchas veces, ver dos personas aesthetic o un grupo completo hace que no les diferencies básicamente, distando de esos conjuntos alocados que te remontan a otro país, cultura, época incluso o que generan un recall de movimientos artísticos; no queriendo menospreciar el aesthetic o lo homogénico, que igual si todos se visten similar pero de otro estilo pasaría lo mismo. El mundo sería tan hermoso y fascinante si aprendieramos a no meter las narices e imponer nuestros gustos sobre los de otros, al menos en ropa y apariencia.

Me gusta quién soy, me gusta quién seré. Puedo afirmar eso en este momento, es bello saborear esas palabras como un hermoso eco que resopla sutilmente por dentro de quién alguna vez se despreció a un nivel insano.

Espero poder ir mañana al gimnasio, le había perdido el gusto y lo convertí en una rutina opresiva, desgastante, pero sabiendo ahora que quizás llevo más tiempo del que sé con problemas de salud y aún así logré tener avances me hizo ver las cosas desde otro ángulo. Saber que es una condición o enfermedad lo que causaba mis dificultades me brinda calma, me quitó culpa, me borró las frases de "soy floja", "soy incompetente", "no sirvo", borró la frustración conmigo misma y me permitió ser más compasiva. Aunque ahora me frustra a veces sentirme débil, pero es muy diferente... Es más una tristeza de sufrir que sufrir creyendo que es fallo mío.

Retomando la importancia de las palabras de otros o no, considero es innecesario "no nos importe la opinión de absolutamente nadie más" para definir la autoestima, no creo que sean dos aspectos inversamente proporcionales sino que tienen su relevancia interdependiente, que es sano considerar esa retroalimentación o no procesando la información bajo nuestro criterio y juicio. Si alguien dice algo que no sabíamos es útil considerarlo, si no lo habíamos pensado o evaluado antes también, aún si concluimos algo que no cambia nuestra opinión original el poder tener la seguridad de preguntarse las cosas ante la reacción/respuesta externa es beneficioso, esencial en más de una ocasión. Sinceramente pienso que no me cuestiono a mí misma sólo por inseguridades, o sentirme en menos. Partí preguntándome sobre mi propósito, objetivos, qué quiero, recapitulando el que a través de mi vida siendo más tímida y sumisa o rebelde y confrontativa a fin de cuentas sólo quiero hacer lo que se me da la gana, vivir como quiero, pensar lo que quiero y decirlo si quiero, sabiendo y siendo consciente de que puede haber rechazo social, pero de todas maneras cualquier persona te atacará por cualquier absurdo motivo sin razón, por lo que no tiene lógica estar en una búsqueda sin fin de "evitar caerle mal a la gente". La culpa nunca es de quienes sufren, es de quienes les atacan.

Quiero ser mejor, quiero ver de qué soy capaz, quiero llevarme al punto de ni dudarlo.

Años sufriendo amenazas, chantaje, manipulación, siendo objeto de burla y crítica, minimizada y ridiculizada. Años sufriendo por eventos traumáticos, de altos y bajos fuertes y extensos. Años, y más años serán para conseguir reestructurarlo todo pero ahí vamos.

Hoy, sábado, con relajo me haré un café y disfrutaré la paz de mi casa, estando en calma conmigo y sin sentirme sola.

Muchos sábados pasé llorando, sufriendo conmigo y por culpa de otros, este sábado al igual que muchos otros días pasados y futuros serán una carta de regocijo para mi vida y todo lo que reste de ella.

Estoy lista y dispuesta a seguir trabajando en mí sobre la marcha, ante los obstáculos que se presenten de una u otra forma. Pero no quita el que me alegre tener panitas, gente con quien charlar amenamente a gusto siendo bien recibida por quién soy tal cual.

Written by Booky_

16 Views
Log in to Like
Log In to Favorite
Share on Facebook
Share on Twitter
Comments

You must be signed in to post a comment!