Estoy en varios desafíos de Habitica, los cuales se enfocan en estudio, autocuidado físico y mental, algunos de ejercicio. La cosa es que uno de ellos es orientado a la compasión con uno mismo... Con ello noté que, de hecho todos los días me tomo un momento para reafirmarme que lo hago bien, pese a tantos pensamientos negativos y emociones que me hacen sentir mal... Hoy marqué el "+" en el hábito, dicho dice: "Forgive yourself. Break the cycle of negative self-talk. No one has to be perfect.". Es una frase que cualquier otro día no me habría causado ningún impacto, pero hoy por lo menos sí, de repente sentí el peso de las palabras en serio, sentí en serio que no me estaba siendo "absurdamente compasiva", sino realmente diciéndome que está bien, no sólo repetirlo, creerlo en serio, decirlo en serio, sentirlo de verdad... Y empecé a llorar, a contener la respiración, se me cayó tanto encima...
Fue una sensación extraña, no de alivio sino de resentimiento, no un resentimiento de odio sino uno de "soltar" algo que duele, como si presionar un cactus contra ti con fuerza te haga no notar que duele, y al soltarlo, ya no habiendo esa presión sientes todo ese dolor...
"Nadie tiene que ser perfecto", me lo he repetido tantas veces en la vida, generalmente a la ligera o intentando convencerme, otras tratando de lidiar con la realidad, pero sentir que "me perdono a mí" por no ser perfecta, es demasiado, es demasiado fuerte... Mis ojos siguen lagrimosos, mi nariz debe estar colorada seguramente, siento como si un puño frío me hubiera dado en el estómago directamente. Siento que de verdad (e inesperadamente) ese desafío me ayudará a marcar una diferencia en mi vida, no es que los otros desafíos no lo hagan, pero se entiende creo. Es un paso pesado.
El desafío no es difícil, denso ni nada, lo que marca realmente es que yo logre avances en este asunto. Eso lo hace pesado...
You must be signed in to post a comment!